Las plantas usadas tradicionalmente como medicinales, representan desde antiguo una herramienta útil y eficaz en el cuidado de la salud ayudando a resolver pequeños trastornos fisiológicos o como complemento para aliviar determinados síntomas y también, en prevención, para el mantenimiento del buen funcionamiento del organismo, es decir para mantener la salud y el bienestar general. Su uso está en auge, quizás por la confianza que merecen entre la población al considerar que estos productos constituyen una solución más suave, con menos efectos secundarios que los medicamentos convencionales. Sin embargo, las plantas de uso medicinal constituyen un vasto universo donde, a menudo, es difícil orientarse de modo racional y seguro en la búsqueda de soluciones eficaces.
El uso de autocuidado de las plantas tradicionalmente consideradas como medicinales, requiere un conocimiento preciso de sus propiedades, modo de empleo y precauciones de uso, para no comprometer otros tratamientos o perjudicar la salud por un uso indebido.
En la farmacia se encuentran profesionales de la salud, idóneos para informar al consumidor de los beneficios que se pueden obtener de las diferentes plantas usadas tradicionalmente como medicinales, de las precauciones que deben observase en su utilización y para proveer los productos de máxima calidad. Además, en el autocuidado de problemas menores, que en principio no requieren de diagnóstico, es siempre necesario un consejo individualizado; de hecho, a pesar del buen margen de seguridad de la mayor parte de las plantas medicinales de uso común, pueden existir contraindicaciones o precauciones especiales para determinados estados fisiológicos (embarazo, lactancia, niños) o interacciones con algunos medicamentos. Teniendo en cuenta todos estos factores, el farmacéutico ayudará al consumidor de forma individualizada a elegir el producto más idóneo, o en caso de que se presuma que el problema no es tan banal como parece, remitirán al consultante al médico para que establezca el diagnóstico y tratamiento oportunos.