La hidrocución, término médico, es un shock termodiferencial que se produce como consecuencia de un cambio brusco de temperatura corporal y no solo está asociado al baño, también al ejercicio físico.

¿Mito o realidad? Pues un poco de lo primero y mucho de lo segundo. Corte de digestión y verano, baño, pisicina o playa son conceptos históricamente ligados por un mantra: el de las famosas dos horas de espera tras la comida. Todos hemos sufrido en primera persona la sentencia de nuestros padres que nos obligaba a 120 interminables minutos de desesperación para poder disfrutar de la mayor afición veraniega. Y lo cietro es que tiene algo de mito.

Aunque anclado a la realidad. Y es que el corte de digestión o hidrocución es un shock termodiferencial que se produce como consecuencia de un cambio brusco de temperatura corporal que efectivamente puede acontecer al entrar al agua, aunque también cuando se practica ejercicio físico.

«Se produce como consecuencia de un cambio brusco de temperatura al entrar de manera precipitada en agua fría, esos grados de diferencia provocan una reacción de los vasos sanguíneos (se estrechan) y por tanto fluye menos sangre al cerebro lo que puede originar un desmayo. Y el peligro de perder la conciencia en el agua radica en que se puede producir un ahogamiento”, explica la doctora Adelaida Sánchez, Jefe de Servicio de Pediatría del Hospital Quirónsalud Marbella.

La hidrocución no se asocia únicamente a la digestión, sino a cualquier circunstancia en la que se da ese cambio brusco de temperatura. La pediatra advierte de que «la mayor incidencia de casos se produce en personas que se bañan tras haber realizado ejercicio físico o haber tomado el sol durante un tiempo prolongado» y puesto que el proceso de digestión requiere mayor cantidad de sangre en nuestro estómago el consejo de la especialista es la cautela y el sentido común.

«Si se ha comido ligero, basta con ir aclimatando el cuerpo al agua e introducirnos de manera escalonada en la playa o piscina. Pero si la comida ha sido muy copiosa, conviene esperar antes de meterse en el agua. No obstante, los síntomas son fácilmente identificables ya que el afectado suele presentar palidez, escalofríos, visión nublada, mareos, náuseas y vómitos», añade la experta.

Por último, la Jefe de Servicio de Pediatría del Hospital Quirónsalud Marbella recomienda, en caso de tener que auxiliar a alquien, procurarle calor para que recupere temperatura. «Normalmente la persona se recupera al cabo de una o dos horas, pero es conveniente acudir a un médico», concluye Adelaida Sánchez.

Recomendaciones básicas:

Cómo detectar un corte de digestión:

En caso de sufrir alguno de estos síntomas:

Fuente AS. Deporte y vida